Esta es una de las victorias más emocionantes de los últimos años. Haber hecho retroceder a Chávarry y a sus mafiosos ha sido una victoria principalmente de la ciudadanía. Muchos dejaron a sus familias por ir a manifestarse; pero es hermoso ver cómo ese sacrificio hizo que en la calle todos fueran una sola familia; es hermoso ver cómo ese esfuerzo es lo que al final construyó la colectividad que tomó cuerpo y fuerza para hacer retroceder a los mafiosos. Ese es nuestro Perú combativo y poderoso. No olvidemos nunca. Ahora sí, que venga el 2019 con lo mejor para todos. Pero a estar alertas también. Los corruptos no duermen, así que nosotros tampoco.